Este módulo introduce los conceptos esenciales de la bioquímica clínica y su aplicación en el análisis de fluidos biológicos. Se revisan los tipos de muestras utilizadas en el laboratorio (sangre, orina, plasma, entre otras), así como los principios para su recolección, conservación y procesamiento. También se estudia el metabolismo de biomoléculas clave y su relación con distintas condiciones clínicas.

En este módulo se abordan las pruebas bioquímicas más utilizadas en el diagnóstico clínico, incluyendo marcadores hepáticos, renales, cardiacos, hormonales y metabólicos. Se analizan los criterios de interpretación de resultados y su aplicación en la detección, seguimiento y control de enfermedades. Se enfatiza la correlación clínico-laboratorial y la toma de decisiones basadas en evidencias bioquímicas.

Este módulo profundiza en los principios de metrología aplicados a la bioquímica clínica, abordando la trazabilidad, la calibración de instrumentos y la validación de métodos. Se revisan los estándares de calidad aplicables al laboratorio clínico y se estudia el uso de tecnologías automatizadas para mejorar la eficiencia y precisión en los análisis.

En el último módulo se exploran distintas metodologías analíticas empleadas en el laboratorio clínico, como la espectrofotometría, la cromatografía, la electroforesis y los métodos enzimáticos. Se aplican estas técnicas a la evaluación bioquímica de líquidos como orina, líquido cefalorraquídeo, y otros fluidos, considerando sus implicancias diagnósticas y clínicas.